Por Fernanda Paniagua
Con el creciente aumento en el número de redes sociales a nuestro alrededor, así como la popularidad de las mismas, proteger nuestra información personal se ha vuelto indispensable. A medida que la tecnología se incorpora a nuestra vida diaria y estamos conectados de forma directa o indirecta con el resto del mundo, existen configuraciones y opciones de seguridad que pueden ayudarnos a garantizar que nuestra información e identidad estén bajo nuestro control.
Para esto, sigue las siguientes recomendaciones:
• Protección de la privacidad: Las redes sociales cuentan con diversos candados para resguardar nuestra privacidad; debemos configurarlos adecuadamente para que, de esta forma, solo las personas que indiquemos tengan acceso a los datos personales y así reducir el riesgo de que estos puedan ser utilizados de forma incorrecta.
• Contraseñas: No uses tu contraseña de una red social en otros sitios de internet y nunca la compartas; procura tener una contraseña diferente para cada plataforma y evita incluir tu nombre o palabras comunes, pues una contraseña debe ser difícil de adivinar; no almacenes contraseñas en equipos compartidos.
• Doble autenticación: Algunas redes como Facebook y Twitter ofrecen una autenticación de dos pasos como medida de seguridad, es decir que para iniciar sesión además de ingresar la contraseña se necesita una clave o un token que bien puede enviarse a nuestro correo o teléfono celular por medio de un mensaje de texto.
• GPS y la localización: Hoy en día, todos los teléfonos inteligentes abren la posibilidad de activar el GPS. Algunas plataformas utilizan esta característica, por ejemplo, para que usuarios puedan indicar la ubicación en donde se hizo una foto. Personas con intenciones delictivas pueden obtener información sobre nuestras actividades diarias, periodos vacacionales, e identificar cuando estamos fuera de casa.
• Cuida lo que públicas: cada vez que publicamos algo en una red social abrimos la puerta de la privacidad. Puede quedar un registro, aunque lo borremos, y esa información ser utilizado para fines malintencionados.
• Cuidado con los permisos de las aplicaciones: Existen diversos juegos y aplicaciones, o demás plataformas disponibles en las redes sociales, la mayoría desarrollados por terceras empresas; para poder utilizarlos debemos aceptar ciertos términos y condiciones por lo que debemos ser precavidos con los permisos que damos. A veces, la pereza de leer ese apartado, nos puede meter en problemas.
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